Sobre 100g Caña de Lomo de Bellota Ibérico 50% Raza Ibérica Selección Especial

Cómodos sobres de 100 gramos de caña de lomo ibérico procedente de cerdos 50% raza ibérica criados en libertad en las mejores dehesas de encinas. Seleccionados rigurosamente y alimentados a base de bellotas durante la época de la montanera, completando su alimentación con hierba, pasto natural y frutos del campo.

Caña de lomo ibérico de bellota de máxima calidad, seleccionado de forma rigurosa de entre todas nuestras cañas de lomo ibéricos de bellota, piezas únicas en nuestros secaderos naturales.

Caracterizado por su elevado nivel de infiltración grasa, lo que le aporta un visible aspecto veteado, así como jugosidad y cremosidad.

Adobado y pimentonado con especias naturales siguiendo la receta artesanal de nuestros antepasados y posteriormente embutido tripa.

Tras su elaboración, la caña de lomo ibérico de bellota selección especial pasa a recibir un lento proceso de curación en secaderos naturales durante aproximadamente 4 meses.

Posteriormente loncheado y envasado al vacío en cómodos sobres de 100 gramos.

Información nutricional aproximada por cada 100g
Valor energético 1197kJ/286kcal
Grasas 15,5
de las cuales, saturadas 5,5
Hidratos de carbono 0,9
de los cuales, azúcares <0,5
Proteínas 35,8
Sal 3,82

*Todos los productos ibéricos elaborados por Jamones Benito Pérez están certificados como productos libres de gluten y por lo tanto, son aptos para celiacos.

Conservar en el frigorífico a una temperatura de entre 0ºC y 8ºC.

Cuando quiera consumirlo, sáquelo del frigorífico 2 horas antes, para que así obtenga la temperatura apropiada para su máximo disfrute.

En caso de que lo le haya resultado posible, puede atemperar el producto con agua caliente.

Posteriormente, abra y oxigene el producto unos 5 minutos.

Por último, consumir el sobre a temperatura ambiente +- 25ºC.

En caso de pérdida de vacío, saque el producto de la bolsa y consúmalo lo antes posible.

Si desea conservar parte del sobre abierto, le aconsejamos lo guarde en el frigorífico envuelto en papel de aluminio, aunque lo ideal, es consumir cada sobre al completo una vez abierto.